Realizar ejercicios físicos es fundamental para tener un trasero firme y tonificado, pero no es lo único: la alimentación afecta directamente a esa zona del cuerpo.
Cuando las proteínas no se toman en cantidades idóneas pueden aparecer distintos problemas de salud, pero en lo estético hay uno muy característico: la flacidez muscular. Ingerir proteínas en una adecuada proporción hace que los músculos y los glúteos se fortalezcan, con lo que la figura se tonifica y adquiere una bonita forma.
Tampoco hay que abusar. Basta con que sigas las pautas de alimentación diaria equilibrada, que debe contener, aproximadamente, entre un 15-20 por 100 de proteínas 30-35 por 100 de grasas y 50-55 por 100 de hidratos de carbono.
Las bases de la dieta
Si además de saber qué alimentos son los más indicados para tus glúteos, quieres que ganen firmeza, pon en práctica esta dieta. De paso, te servirá para perder algún kilo de más. El plan a seguir es el siguiente:
1)La base son las proteínas. Todos los días se incluye una ración en el almuerzo y otra en la cena. Es bastante hipocalórica y aporta cerca de 1.500 calorías diarias.
2)La dieta no debe repetirse más de dos semanas seguidas, pero es una buena idea hacerla una vez al mes o cada dos meses. Si en las 2 o 3 horas siguientes a una comida vas a hacer ejercicio, toma algún alimento rico en carbohidratos de asimilación lenta como pastas, arroz o papas.
3)Elija siempre carnes magras, quita por completo la piel del pollo y demás aves y elimina los bordes grasos de los embutidos. En materia de pescado, es preferible escoger aquellos que están en plena temporada, y mejor los azules.
4)Las frutas incluidas en la dieta son las menos calóricas, sin bien puede elegir algunas más energética, como los plátanos o las uvas pero siempre sin abusar. Si sientes hambre, aumenta las raciones de verduras, pero cuidado con los aliños.
5)La dieta se realiza de lunes a sábado y el domingo “ se descansa”. Puedes comer lo que quieras, pero con sentido común. Los atracones no valen.